Fernando VII fue uno de los reyes más polémicos y controvertidos de la historia de España. Su reinado, que abarcó desde 1808 hasta 1833, con una breve interrupción entre 1810 y 1814, estuvo marcado por las guerras, las conspiraciones, las intrigas, las revoluciones y las traiciones. Fernando VII Primera traición Fernando VII traicionó a su pueblo en varias ocasiones, tanto por acción como por omisión, y se ganó el apodo de "el rey felón" por su falta de lealtad, de honradez y de respeto a la Constitución y a las Cortes. La primera traición de Fernando VII se produjo en 1808, cuando se alió con Napoleón Bonaparte para derrocar a su padre, Carlos IV, y hacerse con el trono de España. Fernando VII aprovechó el descontento popular contra Carlos IV y su valido, Manuel Godoy, que habían firmado el Tratado de Fontainebleau con Francia, permitiendo el paso de las tropas francesas por territorio español para invadir Portugal. Fernando VII encabezó una conjura palaciega contra su pa
La emperatriz rusa, posiblemente propiciado por la misoginia de la época, arrastra desde hace siglos una leyenda negra que no la deja en absoluto bien parada. Lo cierto, sin embargo, es que acabó sentándose en el trono del mayor imperio del siglo XVIII llevándolo a su máximo esplendor. Catalina "la Grande" Ni Catalina ni rusa Catalina “la Grande” nació como Sophie Friederike Auguste von Anhalt-Zerbst (1729) en una villa prusiana ubicada en lo que hoy es Polonia donde su padre, general del ejército, era gobernador. Era hija de una familia noble pruesiana empobrecida, pero vinculada con dos de las familias más influyentes de Alemania: los Anhalt y los Holstein. La joven Sofía recibió una esmerada educación en casa y desde pequeña recibió lecciones de tutores franceses, por lo que su interés tanto por la cultura como por la política le acompañó durante toda su vida. Incluso intercambió correspondencia con pensadores importantes de la época como el filós